QUÉ PROBAR EN UN
«DÍA DE PRUEBA»

Consejos

SI DUDAS SOBRE SI ESTARÁS A GUSTO O NO TRABAJANDO EN UN ESPACIO DE COWORKING, ¡PIDE UN DÍA DE PRUEBA!

¿Cuál es el beneficio de un día de prueba? Pues justamente eso: ¡probar, claro! Pero también te voy a contar cuál es la mejor manera de ponerlo a prueba… qué mirar y qué tomar en cuenta.

Trabajar en un espacio de coworking no consiste sólo en ir, sentarte y ponerte a lo tuyo. Por ello, en un día de prueba, puedes aprovechar para sacar muchas conclusiones útiles.

Si no has estado nunca en un espacio de coworking, pero has oído que existen y piensas que pueden ser una solución a tu situación actual, ¡pide una prueba!

Sin embargo, te recomiendo que no lo hagas pensando en que se parece a trabajar en una oficina, pero con más gente, o únicamente para comprobar si puedes trabajar mejor allí que en tu casa.

Pero antes, pueden surgirte varias dudas del tipo: ¿cómo sabré qué tengo que valorar?, ¿cómo sabré que lo estoy evaluando correctamente? o ¿qué debería tener en cuenta? ¡Pues de esto vamos a hablarte hoy!: ¿Qué probar cuando estás probando?

Lo principal es sentirse a gusto.

Que el sitio te guste, que te motive y que te apetezca ir.

Ya sé que relacionar el trabajo con palabras como ‘motivación’ o ‘apetecer’, quizá no sea lo más común, pero la verdad es que considerando que nos pasamos la mayor parte del día trabajando y lo hacemos con personas que no forman parte de nuestro círculo cercano de afecto, mejor hacerlo en un sitio en el que te apetezca estar, ¿no crees?

El motivo es sencillo: Mira, todos tenemos días mejores y días peores, pero es precisamente en los peores en los que necesitamos un mayor refuerzo para continuar con nuestro propósito. Por eso, si a diario vas a trabajar a un sitio donde te sientes estimulado, esos días en los que uno se encuentra bajo de ánimo, por lo que sea, serán mucho más fáciles de llevar en compañía y en un espacio que te motiva y te carga positivamente.

La influencia del espacio en nuestra conducta es una realidad, tratada por la psicología conductista, para ayudarnos a afrontar las tareas diarias con más recursos.

Así que usa la opción de día de prueba y confirma que el sitio te gusta, te transmite buenas vibraciones y que realmente quieres trabajar allí más que en ningún otro lugar. ¡Esto es fundamental!

No te quedes corto en tu análisis, tienes más que una oficina. ¡Tienes todo un espacio de trabajo para ti!

La experiencia de trabajar en un espacio de coworking como Freeland, pasa por disfrutar de dos cosas: aquellas que compartirás con el resto de coworkers y aquellas que tienen que ver más contigo.

Por eso, te invito a que uses tu día de prueba, no sólo para comprobar qué tipo de silla es la que más te gusta: algunos prefieren las tapizadas, otros las de polipropileno, otros preguntan si se pueden traer un ajuste que tienen para los lumbares, etc.. Todo eso está muy bien, trabajar con ergonomía es importante… ya hemos hablado de ello. Pero piensa también en todos aquellos factores que a partir de ahora van a formar parte de tu ambiente de trabajo porque lo que tienes alrededor está a tu disposición por un motivo.

¿Por qué? Pues muy fácil… ¡porque no siempre trabajamos de la misma manera!

No todas las tareas requieren el mismo esfuerzo, ni la misma concentración, ni tampoco rendimos igual durante el día. Hay horas más productivas que otras. Por ello, considera el espacio como una herramienta en su totalidad, no sólo la mesa que a partir de ahora usarás, sino todas esas otras zonas que tienes oportunidad de probar, que te pueden ayudar a sacar el máximo provecho a una tarea específica, en función de tu carga de trabajo y de tu estado de ánimo.

Os suelo invitar a que veáis TODO Freeland como vuestra oficina, no sólo la mesa, porque todo está pensado para ser usado y compartido, para dar utilidad y posibilidades.

Queremos que disfrutes, que te sientas en casa, que saques la cabeza de tu mesa… Solo de esta manera verás realmente todas las posibilidades que te puede aportar el espacio.

Confirma que tienes todo lo que necesitas y más.

Este es el momento para confirmar que tienes todo lo que necesitas para desarrollar tu trabajo adecuadamente.

¡No temas preguntar! Que no te limite una particularidad concreta, porque si está en nuestras manos intentaremos resolverlo, ¡sin lugar a dudas!

Ahora… si te preguntas si puedes traerte la silla de casa, ya te digo que no. O si tu puesto lo puedes compartir con otra persona mientras tu no estás, también te digo lo mismo, ¡no!

Pero, si lo que necesitas es traerte tu impresora y tu pantalla y tener un sitio para guardarla, pero no tienes un puesto fijo sino la opción nómada, no dudes en preguntar, porque seguramente ya tengamos solución, porque alguien ya lo ha necesitado antes que tú.

Ten por seguro que pondremos a tu disposición la máxima capacidad de recursos para que puedas hacer tu trabajo.

Ten por seguro que a través de Freeland:

-Darás la imagen profesional que quieres dar.

-Podrás lograr los objetivos que te has propuesto tomando la decisión de venir a trabajar aquí.

-Tendrás un ambiente en el que trabajarás a gusto.

-Te verás a ti mismo muy bien en los próximos tres, seis y doce meses por venir.

Quien sabe… hubo quien vino queriendo estar «sólo un mes» y terminó quedándose un año entero.

Esto va de tomar café o té, o lo que quieras, pero de tomar algo con alguien.

Aunque tenemos muchas valoraciones en Google, no hay nada como preguntar directamente a otros coworkers y que te cuenten su experiencia. Pregúntales cuál era su situación antes de venir y qué han podido mejorar gracias a estar en Freeland.

Encontrarás vivencias personales muy normales, con las que seguro te identificas: padres de familia que no tienen sitio para trabajar en casa, personas que viven solas y la soledad les hace mal (aunque la soledad nos hace mal a todos, la verdad), alguno necesitaba poner una rutina y un orden en su día a día o simplemente separar la vida personal de la profesional, otros buscan estar más motivados y tener más estímulos, por ejemplo. Y un largo etcétera.

Pregunta a otros coworkers, sin duda, porque son una fuente de información de gran valor para que puedas tener una lectura mucho más real de hasta qué punto venir a un espacio de coworking como Freeland te puede ayudar.

Por eso te digo que esto de va de tomarse algo con alguien.

¡A la próxima te invito yo!

Entonces, ¿quieres probar? ¿Cuándo quedamos?