Coworking: Un presente muy positivo

Este pasado fin de semana se celebró la Coworking Spain Conference 2016 en Barcelona y participamos como ponentes en una charla sobre la visión del coworking en el presente.

Fuera de un exceso de positivismo, estos son los motivos por los que veo un presente en ascenso para el coworking, como cultura que ha cambiado la manera de trabajar de muchos profesionales por todo el mundo:

1. Un presente lleno de cambio y de nuevas propuestas.

La realidad digital ha cambiado tanto el escenario laboral que, ahora, sólo somos un reflejo muy borroso de lo que realmente llegaremos a ser. Un cambio que no sabemos si llegará a desembocar en una situación estable o, por el contrario, la realidad estará en continua transformación. Hoy no hemos llegado a un escenario que resuelva como serán las cosas los próximos 10 – 15 años, porque la velocidad a la que se producen los cambios no permite establecerse. Este presente que vivimos abre las puertas de las oportunidades, y me explico, considerando que el origen del coworking parte de internet, cuanto más liberemos los espacios de trabajo de una rigidez innecesaria, más validado estará nuestro modelo frente a situaciones de compromiso a medio o largo plazo como son los alquileres, fianzas, contratos a varios años, salarios, nº de empleados, etc… ese modelo está obsoleto, porque las oficinas con el tiempo serán totalmente líquidas,  por lo que esto plantea un presente positivo en el camino hacia el cambio de esa realidad.

Oficina, ¿qué es una oficina?, para mi ya no tiene realidad, me hablas de oficina y miro a mi padre y, como le preguntes a un chaval de 23 años, alucina. Porque no encaja con mi forma de entender la relación del binomio vida – trabajo. Oficina es sinónimo de rigidez, estar sentado detrás de una mesa 8 horas todos los días. Esta es una realidad para muchas personas y seguirá siendo mucho tiempo todavía, por supuesto, pero también es cierto que ya queda menos tiempo para que esa realidad deje de ser parte de la generalidad, más aún, como señalaba antes, si tenemos en cuenta la velocidad a la que hoy se producen los cambios. Ya no tenemos que esperar 40 años para que un cambio cobre efecto, sino que el cambio es constante. Luego será fruto de la participación de los agentes del ecosistema: empresas, sindicatos, gobierno, etc… para que se transforme definitivamente en una realidad general y , por supuesto de la velocidad y de la capacidad de adaptación a los cambios de todos ellos, porque la transformación digital es voraz como la evolución. El que no se adapte desaparecerá.

[fusion_tagline_box backgroundcolor=»#f7f7f7″ shadow=»yes» shadowopacity=»0.1″ border=»1px» bordercolor=»#a0ce4e» highlightposition=»top» content_alignment=»left» link=»» linktarget=»_self» modal=»» button_size=»» button_shape=»» button_type=»» buttoncolor=»» button=»» title=»Ejemplo real» description=»» margin_top=»» margin_bottom=»» animation_type=»0″ animation_direction=»down» animation_speed=»0.1″ animation_offset=»» class=»» id=»»]Hace muy poco tiempo una empresa que ofrece créditos al consumo se puso en contacto conmigo para ver si les podía ayudar a encontrar una empresa con la que compartir el espacio que les sobraba en plena calle Orense, sólo estaban ocupando el 25% de la superficie, aproximadamente. Esta realidad es más común de lo que parece, porque la transformación digital cambia los procesos de trabajo y los puntos de contacto con el usuario, por lo que la cantidad de personal de una compañía disminuye de forma drástica cuando ponemos en marcha los mecanismos digitales[/fusion_tagline_box]

Te invito a que veas esta comparativa que hemos realizado.

Luego, cuanto mejor posición tengamos como líderes de este cambio en el entorno de trabajo y en la manera de trabajar, más oportunidades tendremos de crecer y de ocupar una posición relevante en el mercado, para guiar a otros a entender la relación que existe entre espacios de trabajo y comunidades.
Todavía queda tiempo porque la tecnología juega en esto un papel fundamental, recordar que la Ceo de yahoo, Marissa Mayer, el año pasado eliminó el teletrabajo con amenaza de despedir a todo aquel que no estuviera de acuerdo.
La realidad es que no hablamos de trabajar frente al mar, se trata de poder alternar experiencias, trabajo, aprender, crecer, seguir explorando y vivir ligero de equipaje. Se trata de poder inspirarte, de poder alimentarte de diferentes entornos que te hagan cambiar el chip, no estancarte, mantener  tu mente abierta al cambio y a otras experiencias. No es para siempre, no sirve para todos los momentos, ni para todas la etapas, pero tener la posibilidad de hacerlo es una ventaja que antes no teníamos.
Luego sinceramente creo que el futuro nos depara una gran oportunidad por delante, si sabemos ocupar un sitio relevante en este proceso de cambio.

2. La oportunidad de colaborar.

Colaborar con todas aquellas empresas que se van dando cuenta de que la transformación digital no es sólo un cambio de procesos, es  algo mucho más profundo, porque es un cambio cultural y, ese cambio tiene su reflejo en el espacio en el que trabajamos y en la manera en la que gestionamos los recursos humanos de nuestra empresa.
Actualmente la influencia que han tenido los espacios de coworking para difundir la cultura de trabajo como proceso colaborativo ha sido muy pequeña, pues el tiempo que llevamos desde que se abrió en primer espacio de coworking, no ha servido para que estos tomen la suficiente relevancia como para ser punta de lanza de una metamorfosis que acaba de empezar.

El presente es positivo y la oportunidad existe para el coworking, porque lo que les hace fuertes es su cultura positiva y abierta al cambio, ingredientes esenciales de cualquier proceso de innovación. Por lo que, si tomamos como máxima que, las empresas cada vez más apuestan por innovar y por asumir el cambio hacia una economía que gira al rededor del usuario, más sentido tienen que incorporen el coworking como cultura que se refleja en el espacio y en su relación con sus empleados, viéndoles como una comunidad.

El error de cuantas incursiones veo que se practican en nuestro país sobre el coworking, se centra en creer que la clave está en tener mesas de ping-pong, cerveza y cafés. Zonas con mesas continuas son etiquetadas de zona coworking, cuando los espacios abiertos, como manera de distribuir los espacios de trabajo ha existido desde hace ya muchos años.

La enseñanza que podemos transmitir duerme, cuando deberíamos despertar, para enseñar que no consiste en tener un espacio con mesas de colores, sino de definir una atmósfera que conduce amablemente al cambio, una atmósfera que invita a transitar sin necesidad de imponer el cambio, sino usar elementos, signos, la arquitectura, para inducir el cambio de manera natural.

A principios del año pasado una empresa de valoraciones inmobiliarias nos quiso comprar, rechazamos su oferta después de mucho rondar y, al final, decidieron abrir por su cuenta un espacio, copiando mucho de lo que habían aprendido de nosotros.

Este es un proceso erróneo, no porque yo lo diga, sino porque en el mercado hay ejemplos similares donde la empresas actúan de forma totalmente diferente y os pongo un ejemplo:

Para asistir a la conferencia me he quedado en un hotel que no conocía, pero que me llamó mucho la atención y que recomiendo por el servicio que ofrecen, hablo del Hotel Vueling by HC, HC, es de Hotel Catalonia, ¿creéis que tiene sentido que Vueling ahora se meta a gestionar un hotel?, pero si no saben…, por eso contratan a Hoteles Catalonia con toda la experiencia que tienen en el mercado, Vueling aquí sólo pone la marca.

Luego la pregunta es, ¿porqué el coworking sí es algo susceptible de ser practicado por cualquier persona, en cualquier lugar, de cualquier manera?.., porque en el fondo nos quedamos en la superficie, en lo artificial y en los artificios, en la idea de un espacio abierto, en los colores, en las cabinas de teléfono o en el cesped artificial. Porque nadie sabe que para gestionar un espacio tienes que, en primer lugar, ser capaz de promover una comunidad de profesionales y después fidelizarla y, mantenerla y, para eso, tienes que ser una persona muy completa, con mucha formación y con un pasado profesional totalmente transversal. Si no  tienes una comunidad previamente, la tienes que construir y para eso hacen falta muchas habilidades.

Por ello, veo un presente muy positivo, porque tenemos la oportunidad de hacer llegar este mensaje constructor de comunidades, para llevar el coworking a todas partes como un código abierto que se puede implantar en empresas y corporaciones, para convertir a sus equipos en comunidades abiertas a la innovación y al cambio.

Y nosotros podemos enseñar a hacer eso. ¿Porqué?, porque en realidad hoy por hoy somos los únicos que hemos demostrado ser capaces de atraer a personas, profesionales y empresas de forma totalmente libre, dispuestos a pagar por ello a cambio de un servicio, de un entorno y de una cultura con la que se identifican. El resto de realidades e iniciativas que especifican entre las ventajas de su propuesta, tener espacio o zona coworking, atraen al público mediante otro tipo de incentivos.

Esto es para sentirnos muy, pero que muy orgullosos del trabajo que realizamos. Que la gente encuentre en nuestra propuesta un lugar al que ir a trabajar todos lo días es un verdadero éxito y, por ello, creo que esto nos cualifica para guiar a otros en el proceso de dar forma a una comunidad, el verdadero alma que hace palpitar un espacio de coworking.

Hoy en día ya tenemos ejemplos de gestores de espacios de coworking que son contratados por otros espacios que nacen, por medio de una consultoría, para que les ayuden en el proceso de puesta en marcha. Como por ejemplo PBC Coworking en Alicante.

Nosotros en 2014 ayudamos a construir el área de innovación de Repsol de la mano de Thinkersco, freelanderos, amigos y coworkers.

Las empresas son comunidades y, el coworking es, una oportunidad para implantar una cultura innovadora como no habían tenido antes, en cada una de las personas que forman parte de la empresa, pero para ello tienen que saber gestionar y formar su comunidad.

3. Las ventajas de una vida flexible.

El otro motivo por el que creo que el presente es muy positivo es porque, detrás de lo que hacemos encontramos una filosofía de vida basada en la flexibilidad y en la libertad que hace que la vida de las personas cambie para mejor, por lo menos, en una etapa de su vida, normalmente aquellas etapas que tienen que ver con el inicio de un cambio en sus vidas, un proyecto, cambio de trabajo, un despido, los hijos son mas mayores etc…
El coworking cada vez mas se presenta como un forma de vida en la que trabajo y vida personal tienen un balance muy positivo, por el aumento de calidad de vida que se consigue ahorrando tiempo, dinero y disfrutando de una vida mucho más saludable.

Trabajar a 2 minutos de tu casa, ir a comer a casa todos los días, no perder tiempo en transporte, ahorrar dinero porque ya no necesitas coche y cuando lo necesitas usas car2go o cabify o…, compras por buyfresco y no tienes que hacer la compra, porque usas deliverry, vas a recoger a tus hijos al colegio, vives el barrio y en el barrio encuentras todo lo que necesitas, haciendo que tu vida sea mucho más eficiente y te deje más tiempo libre para hacer lo que quieras.

[fusion_tagline_box backgroundcolor=»#f7f7f7″ shadow=»no» shadowopacity=»0.1″ border=»1px» bordercolor=»#a0ce4e» highlightposition=»top» content_alignment=»left» link=»» linktarget=»_self» modal=»» button_size=»» button_shape=»» button_type=»» buttoncolor=»» button=»» title=»Caso real» description=»» margin_top=»» margin_bottom=»» animation_type=»0″ animation_direction=»down» animation_speed=»0.1″ animation_offset=»» class=»» id=»»] Hace un mes más o menos una empresa de arquitectura se puso en contacto con nosotros porque iban a incluir dentro del folleto promocional de las viviendas que estaban promocionando, que en la zona había un espacio de coworking como ventaja para vivir en la zona.[/fusion_tagline_box]

Damos soporte y estructura al que no la tiene, ofrecemos un entorno de confianza y dedicamos tiempo e interés en saber como podemos ayudar a que les vaya mejor. A demás, esto se fusiona con el concepto coworking – barrio – servicios – cercanía – ahorro, cada vez más interesante. La influencia positiva que pudiéramos llegar a tener cada uno en nuestra zona es un activo muy, muy grande que todavía no hemos explotado al máximo.

Por todos estos motivos veo un presente muy positivo y sin duda me gustaría mucho saber que opinas al respecto. Así que deja tus comentarios y podemos hablar y compartir opiniones.